El gobierno federal ha tomado medidas para entregar una futura vacuna contra el Covid-19 sin costo alguno para las personas y las familias durante la pandemia. Esta es la forma en que las vacunas se han puesto a disposición del público en emergencias sanitarias pasadas.
Comprando vacunas al por mayor
Durante previas crisis de salud pública, tales como la pandemia de influenza H1N1 en 2009, el gobierno federal ha trabajado con los desarrolladores de vacunas para comprar una cantidad grande de dosis de vacunas. Al hacer estos acuerdos con los diferentes desarrolladores de vacunas, el gobierno aseguró un suficiente suministro para proteger a las diversas poblaciones del país y a las personas más vulnerables a contraer la enfermedad.
Estos acuerdos se establecen durante el proceso de investigación y desarrollo para permitir que el gobierno federal pueda planificar con anticipación, prever las necesidades del público y prepararse para la distribución rápida y eficiente de las dosis. Para ayudar a resolver la emergencia del año 2009, el gobierno compró las vacunas y las proporcionó a las comunidades de mayor riesgo sin costo alguno para quienes las recibieron. Esto ayudó a poner fin a las crisis de salud de forma rápida y segura.
No costos de desembolso
Los desarrolladores de vacunas entregan dosis al gobierno federal una vez que son aprobadas por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés). Tras ser entregadas las vacunas, el gobierno supervisa cómo se asignan y distribuyen las vacunas a las personas y las comunidades locales.
